Maras, la guerra no encontrada

En estos momentos la violencia producida por las maras está provocando que miles de personas principalmente en El Salvador, Guatemala y Honduras tengan que huir para salvar sus vidas.

Extorsión, violaciones, secuestros, asesinatos y desapariciones se producen de forma cotidiana en estos 3 países. Pero las víctimas no suelen denunciar estos delitos por temor a las represalias y porque no confían en las autoridades cuya protección es claramente ineficaz.

Viven en una guerra no encontrada.

EL ASILO Y LAS VÍCTIMAS DE MARAS, ¿QUÉ PEDIMOS?  

CEAR considera que las víctimas de maras son objeto de persecución según la actual Ley de asilo española, ya que sufren en muchas ocasiones violaciones grave de los derechos fundamentales y no pueden recurrir a una protección eficaz por parte de las autoridades.

 

Sin embargo hasta ahora estas situaciones de persecución apenas se han tenido en cuenta, y solo recientemente la Audiencia Nacional ha resuelto favorablemente solicitudes de asilo que presentan víctimas de pandillas procedentes de El Salvador, Guatemala y Honduras.  LEER MÁS.

COMUNICADO: En el Día Mundial del Refugiado, CEAR reclama el derecho de asilo para las víctimas de maras

CLAVES PARA ENTENDER POR QUÉ LAS PERSONAS HUYEN DE LAS MARAS 

1. Las maras tienen su principal presencia en el Triángulo Norte de Centroamérica formado por El Salvador, Honduras y Guatemala.

 

2. El año pasado, en estos tres países se contabilizaron 13.129 homicidios, esto supone 36 asesinatos al día, uno cada 40 minutos.

 

3. El Salvador tiene actualmente la mayor tasa de homicidios del mundo (60 muertes violentas por cada 100.000 habitantes). En los últimos años, el número de asesinatos al año -en torno a 5.000- es similar a los que se producían en el periodo de guerra.

Acciones #GuerraNoEncontrada

PRESENTACIÓN LIBRO

ERROR EN EL SISTEMA

EL LABERINTO DE LAS MARAS

DÍA MUNDIAL DEL REFUGIADO

Créditos

Fotografías: Edu Ponces y Pau Coll – RUIDO Photo – | El Faro.

Vídeos Centroamérica: Marcela Zamora y El Faro

CEAR agradece a todas las víctimas de maras que han tenido el valor de ofrecer su testimonio para esta campaña. Por motivos de seguridad sus rostros han sido ocultos y sus nombres modificados.