PIDE GARANTIZAR LA REAGRUPACIÓN FAMILIAR

© Ignacio Marín

Para que las familias refugiadas puedan estar unidas y en paz.

Las personas que se ven forzadas a huir, en ocasiones, tienen que dejarlo todo atrás. Y cuando decimos todo, es todo. A veces, también a la familia.

Por eso hay muchas personas refugiadas que, a pesar de haber sobrevivido a una peligrosa ruta migratoria y encontrar protección en España, no logran estar tranquilas.

Son muchas las personas que experimentan el duelo migratorio por una migración forzada y no deseada, nostalgia por lo que se ha dejado atrás, e incluso culpa por estar en un lugar seguro mientras su familia sigue en peligro.

Porque nadie está en paz hasta que su familia está a salvo.

La extensión y reagrupación familiar es materialización del derecho a vivir en familia para las personas refugiadas y una de las escasas vías legales y seguras para acceder a la protección sin jugarse la vida.

Sin embargo, aunque sea un derecho reconocido en la Ley de Asilo, existen muchos obstáculos que impiden a las personas refugiadas ejercerlo y reencontrarse con sus familias.

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Cada paso hacia el abrazo, se vive con emoción

Las personas refugiadas pasan por muchas fases y estados emocionales desde que salen de sus países de origen hasta que, por fin, logran reencontrarse con sus familias. Cada persona vive el proceso migratorio de una manera distinta, pero en cada una de estas fases, hay emociones predominantes, complementarias y, a veces, hasta contradictorias entre ellas.

LA HUIDA

Muchas personas refugiadas experimentan una falta total de control sobre sus vidas ante las situaciones de peligro que viven. El miedo se apodera de ellas y la huida es la respuesta instintiva para sobrevivir.

MIEDO

EL VIAJE

La necesidad de supervivencia activa en las personas refugiadas todos los mecanismos para afrontar los desafíos, los peligros y las situaciones de violencia durante el tránsito. La valentía y la resiliencia son el motor de quienes superan el viaje.

DETERMINACIÓN

LA LLEGADA

La llegada es un momento de alegría y sobre todo de alivio, después de sobrevivir a rutas migratorias en las que, muchas veces, han sufrido distintos tipos de violencia y han visto su vida en peligro. En ese momento, por fin, sienten la seguridad que buscaban.

SEGURIDAD

LA ACOGIDA

En la fase de acogida empiezan aparecen emociones reprimidas y recuerdos recurrentes de episodios traumáticos. Las personas refugiadas suelen experimentar el duelo migratorio, por una migración no deseada, nostalgia, por lo que se ha dejado atrás, e incluso culpa por estar en un lugar seguro mientras sus hijos o su familia siguen en peligro.

NOSTALGIA

LA ESPERA

La ansiedad por una espera que se puede hacer muy larga y por no estar con la familia, tanto en lo buenos como en los malos momentos, se mezcla con la esperanza del reencuentro y el sueño de un futuro junto a ella.

ILUSIÓN

EL REENCUENTRO

El reencuentro es para muchas personas refugiadas el momento más feliz de sus vidas, ese instante en el que, después de tanta pérdida y tanto sufrimiento, por fin, pueden construir un futuro junto a su familia en un lugar seguro.

FELICIDAD

Firma por el derecho a vivir en familia de las personas refugiadas.

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Ayúdanos a conseguir que las familias refugiadas se puedan dar, por fin, el abrazo más esperado.

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Nuestras demandas

1

Desarrollar la extensión y reagrupación familiar como una vía legal y segura para solicitar asilo

Como se recoge en el art. 41 de la Ley de Asilo, desarrollar el procedimiento de extensión y reagrupación familiar como una vía legal y segura, para que las/os familiares en necesidad de protección internacional no se vean forzadas a jugarse la vida en peligrosas rutas migratorias para reunirse con su familia.
2

Agilizar la tramitación de expedientes de extensión familiar

Actualmente se puede demorar más de un año, algo que es incompatible con el principio de reagrupación familiar, derecho a la vida en familia y el principio humanitario de ayudar a que las personas refugiadas reconstruyan su vida en el país de destino.
3

Facilitar salvoconductos a los/as familiares reagrupadas

Para casos en que no puedan obtener o renovar su pasaporte para poder realizar el traslado a España, es imprescindible facilitar salvoconductos a los familiares a los que se les ha concedido la protección internacional por extensión familiar.
4

Eliminar los límites a la extensión familiar no previstos en la ley

Los límites que recoge la ley han originado que haya solicitudes de extensión presentadas hace años y que no se están instruyendo. Así como eliminar criterios restrictivos de incompatibilidad entre la extensión Familiar y la solicitud de traslado para la solicitud de protección internacional del art. 41 de la Ley de Asilo, cuando exista riesgo individual de los miembros de la familia por los motivos de persecución.
5

Establecer criterios uniformes para la acreditación de la relación de parentesco y/o dependencia o convivencia previa

Además, estos criterios deben estar adaptados a las realidades socioculturales de los países de origen y residencia de los familiares, a las condiciones de seguridad de los mismos, así como a sus circunstancias personales.
6

Garantizar la grabación de las solicitudes presentadas a través de la sede electrónica y la notificación en tiempo y forma de la resolución de la solicitud de Extensión Familiar

A fin de evitar la dilación del procedimiento es necesario comunicar a la persona interesada el número de expediente, el número de NIE y el estado de tramitación de la solicitud. De igual manera, es necesario garantizar la notificación de la resolución ya sea concedida o denegada la extensión familiar.
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